A las 10 de la mañana del sábado 25 de agosto se daba la salida de este nuevo reto. Desde la plaza de toros de Huerta de Rey, los 53 equipos inscritos para la prueba sprintábamos para coger el mapa necesario para la orientación a pie. Tras aproximadamente 35 minutos de carrera regresábamos a la plaza tras completar las 11 balizas necesarias para comenzar la siguiente sección.
Espi y yo estábamos sorprendidos de la cantidad de bicis que todavía quedaban en la plaza (significaba que lo estábamos haciendo bien), mientras Espi marcaba en el mapa la ruta a seguir yo me equipaba y revisaba el material. El gran orientador Espi propuso dirigirnos directamente a la prueba de remo cogiendo algunas balizas por el camino, me pareció un plan perfecto.
Llegamos al inicio de la prueba de remo los segundos y cuando la finalizamos se demostró que habíamos elegido bien, había 6 parejas esperando a que llegásemos ya que el número de canoas era limitado.
Nuestro siguiente objetivo fue la prueba de escalada. Cogiendo varias balizas durante el trayecto entre pruebas, la escalada de una sencilla vía nos hacia puntuar. Ya solo quedaban 2 pruebas.
El siguiente objetivo fue el corte de troncos que se realizaba en el centro del pueblo. Nos costó un poco coger el truco a la prueba pero conseguimos realizarla sin penalizar.
La última prueba consistía en subir una pendiente muy pronunciada sobre la bicicleta sin poner el pie en el suelo, según lo lejos que se llegase daban 25, 50, 75 o 100 puntos, se necesitaba habilidad y fuerza, al sobrepasar la marca de 50 puntos un pinchazo en el cuadriceps me hacia caer, hundiéndome física y moralmente por no haber llegado al 100, pero los ánimos del público y de mi compañero me hacían continuar.
Nos quedaba tiempo y decidimos ir a buscar más balizas, fuimos a por la baliza que más puntuaba (92 puntos) cogiendo otra de 50 por el camino y casi nos sale caro. La maldita baliza estaba escondida, cuando por fin apareció nos quedaban 25 minutos para finalizar la prueba iniciando una pequeña contrarreloj por equipos para llegar a la plaza de toros a tiempo. Espi la calificó como prueba especial.
Al llegar a la plaza sin haber penalizado casi me emociono, me invadió una sensación de satisfacción personal inmensa sabiendo que lo habíamos hecho bien para no haber participado nunca en una prueba de este tipo.
Destacar la magnifica organización que en cada prueba tenia unos magníficos avituallamientos y al finalizar la prueba nos permitió bañarnos en la piscina del pueblo. Como colofón nos obsequió con una comida con dos platos, postre y barra libre de cerveza y refrescos, simplemente IMPRESIONANTE.
Gracias a todos por seguirnos. PACHO
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